¡Qué verde era mi prado!

Hoy dedico el post a todas mis chicas: Willow, Kaos, Jim, Diablilla, Mixi, Choi, Ume, Ana, María, Lunax, Kat... Feliz Día de los Enamorados, wapas, seguid enamorándome día a día en vuestros comentarios

No muchos de los que leen esto habitualmente me conocen, así que no muchos han visto mi cara. Sólo esos pocos podrían definir exactamente como ven mi cara... El caso es que yo no sabría definir tampoco bien bien mi cara… Mi cara es... mi cara es (¡¡¡fea!!!) Se puede saber quien ha dicho eso… Que me voy a enfadar, en mi propio blog y llamarme feo..

Bueno, pues sí, soy feucho, en eso no mentiré, digamos que al reparto yo llegue tarde vaya usted a saber… Pero vaya dejando a parte el tema de la belleza de mi cara, yo creo que tengo cara de “te puedo soltar un rollo, colega”… Si no sabéis a que corresponde esa cara, yo os lo explico para que comprendáis lo que me ha pasado hoy en el bus, de vuelta a mi “home sweet home”…

Yo creo que mi cara atrae a la gente de la calle para pedirme, preguntarme o ofrecerme cosas (y nunca es sexo sin compromiso… sigo esperando el día)… Es como un continuo, salir a la calle y que la gente me pare por cualquier razón…

Yo soy el que pasa justo por el lado del guiri que tiene el mapa extendido para que me retenga y me pregunte como ir a la calle de al lado… Yo soy el que seguramente debo tener cara de fumador empedernido sin haber fumado nunca y me piden cigarros o fuego (y no el de mi cuerpo sabrosón) … Yo soy al que le intentan vender cualquier cosa imaginable por parte de las personas más insistentes del mundo… Yo soy al que una pareja de Hare Krishnas le intentan convencer en pleno Portal de l’Angel de que debo irme a una granja cerca de Granollers a “encontrar” no sé qué que había perdido (esto os lo encuentro otro día, pero es para morirse, debía tener yo 15 años e iba con un compañero de instituto)… Yo soy el que para los de la Cruz Roja que hacen guardia enfrente del edificio de mi empresa tengo cara de no afiliado de todas todas (aunque lo estoy desde hace dos años) y me intentan inscribir una vez más… Yo soy al que le preguntan como ir a ¡¡¡Ibiza!!! en mitad de Las Ramblas un grupo de guiris mamados (buah, si vierais como los envié Rambla abajo, al puerto, diciéndoles que cada hora salía un ferry que llegaba a Sant Antoni en dos horas)… Yo soy al que le hacen encuestas de todo tipo en los sitios menos pensados… Yo soy al que le abordan las típicas niñas con coletas y cara de buenas de EGB (o ESO o lo que sea ahora) con números de lotería para su viaje de fin de curso (viaje de iniciación sexual y depravación seguramente)…

En fin, yo tengo cara de “te puedo soltar un rollo, colega”…

Hoy esa cara que atrae a todo Dios, menos a las rubias de piernas largas, ha atraído en el bus a un tipo muy raro… Iba yo tan tranquilo en un 74 medio vacío, escuchando algunas coplas en mi mp3, cuando de pronto, un tío a mi derecha, al otro lado del pasillo que separaba nuestros asientos, me planta en la cara una caja de cartón dibujada…

Eiinnn… El tío este era un rubio con cara algo rara, despeinado y ojos azules detrás de unas gafitas redondas… Me ha empezado a hablar y me he tenido que quitar los cascos… Era extranjero pq tenía acento raro… Me ha preguntado si me gustaba el dibujo (“Cielos, un loco”)… Yo no sabía que decir, y él seguía hablando… La caja que me enseñaba era una caja de botes de tempera que tenía en un asiento de al lado del suyo. En la cubierta se supone que estaba dibujando algo… “Un prado” me decía, “y una granja” ha seguido. El prado he supuesto que era la mancha verde enorme de la izquierda de la caja, y la granja una casa muy rudimentaria de las que dibujaba mi sobrinito hace años en color marrón… “Cielos, un loco” me he vuelto a repetir. Le he dicho que estaba muy bien (nota: darle la razón a los locos y sonreír). Él me ha empezado a decir que iba a hacer el prado más grande, y me ha preguntado que si quedaría bien, yo le he dicho que sí, y se ha vuelto a sus cosas.

Yo la verdad es que me estaba partiendo de la risa… Luego, al cabo me ha vuelto a plantar la caja en la cara, y yo no me he quitado los cascos esta vez, sólo le he sacado el pulgar, y él se ha dado por satisfecho. Pero he visto que se ha girado al asiento de detrás suyo. Había un hombre algo mayor que yo, y una chica más joven… He bajado el volumen de los cascos al cero, y he oído como le contaba la historia del prado y la granja a la joven. Si hubierais visto las caras que ponía la chica “socorroooo” decían sus ojos. El guiri loco venga a contarle cosas “¿están bien las líneas?” ella con unos ojos de miedo le decía que sí, que sí… “Quiero hacer una superficie diferente para el prado…” Y la pobre que no sabía que decirle… Por fortuna, los locos como este no son mala gente y enseguida se vuelven a su mundo…

Más tarde una mujer mayor se ha sentado a mi lado, y se ha convertido en la víctima del tío… Otra vez la misma historia, la del prado y la granja… Yo cada vez me partía más por dentro, especialmente al oír la palabra "prado"… La mujer mayor flipaba albondiguillas pero le daba largas…

En fin, que se ha bajado al poco la mujer mayor y otra vez me ha atacado el rubiales… Al final, el prado (que seguía siendo una mancha verde en la caja) ha quedado algo arruinado por el río que previa consulta conmigo ha intentado pintar… Un prado echado por la borda, ya que el río se le ha desbordado bastante y casi le inunda la casa… Pero bueno, el tío estaba más feliz que el bomba…

Se ha acabado bajando dos paradas antes de la mía, y se despedido de mi efusivamente con un “adiós, colega”. Incluso desde fuera del bus me saludaba con la mano el pollo… ¡Qué feliz que debe ser!

Me he girado a la chica cuando se ha ido, y se partía el culo, pero me ha dicho que por un momento se había cagado de miedo… Luego hemos compartido lo que nos había dicho y lo del prado es que nos podía…

En fin, que una anécdota más de mi triste vida de “vea a Xavi y revélele su rollo”. No sé, algo tengo en la cara que atrae a toda esa gente… ¡Qué lástima que en los bares y las discos mi cara pase absolutamente indiferente!

Hay un dicho que dice “que hablen de mí aunque sea mal”. Yo lo transformaría en un “que les guste mi cara, aunque estén locos”

Canción del día: The fool on the hill de The Beatles. Un homenaje a todos los locos pacíficos del mundo "... The fool on the hill, sees the sun going down, and the eyes in his head, see the world spinning around..."