No soy un ladrón

KV dedicado a: la chica que se ha sentado delante mío en el bus esta noche. Ha hecho un dibujo increíble de una chica agachada delante de un árbol frente a un lago en un plis plas...

No sé quien se preguntaba hace unas semanas en mi blog que a qué me dedicaba. Bien, pues la respuesta normal es que a la informática, aunque como bien sabéis mucho yo pertenezco a esa élite reducida de seres casi divinos que populamos por la tierra desprendiendo un aura refulgente, pues somos no menos que Ingenieros Industriales.

Informática, no nos desviemos del tema, eso es a lo que me dedico. Pero en días como hoy podría decir que soy del CSI Barcelona como mínimo, y es que en eso ha consistido mi día hoy. Demostrar quien es el autor de un crimen... Pero la cosa no tendría mucho más cosas que destacar hasta ahí, pq los de CSI son muy buenos y siempre descubren al asesino. El problema es que yo he tenido que probar que el autor del crímen no era yo.

Dejadme que os cuente. Nuestra empresa ha desarrollado un software por así decirlo que sirve de infraestructura para que otras empresas desarrollen aplicaciones utilizando esa infraestructura… Bien. Se entiende ¿no?

El problema es que el mundo no es perfecto, y a veces las cosas no funcionan. Y hay dos alternativas generalmente. Que la infraestructura que usan las aplicaciones, no funcione y haga fallar a las aplicaciones que la utilizan, o bien que sean las aplicaciones que estén mal hechas y no funcionen por utilizar mal la infraestructura…

No “problemo” so far… En principio todo pasaría por saber quien es el responsable del problema, el responsable lo detecta y lo arregla. El problema es que a veces decir que falla y quien lo hace mal no es muy fácil. Todo está muy ligado, y a veces los problemas son bastante raros.

Pero luego hay otra capa que quizás no conocéis que lo lía todo más. Que son las empresas… Resulta que hay una empresa A que contrata a B para que haga la infraestructura, y a C para que haga una aplicación que funcione con esa infraestructura… Entonces, B y C se matan entre ellas antes que aceptar un error… Lo has hecho tú. No, lo has hecho tú. No, tú. No, yo no, tú. Así ad-infinitum. Bien, pues yo pertenezco a B…

Pero os explico el caso siguiendo la jerga CSI. Hace unos días se detectó que había un cadáver en la aplicación de C. Y la gente de C dijo “lo ha matado Xavi”. Xavi, el pobre, dijo, “seguro que no lo habéis matado vosotros, mira que yo soy un trozo de pan”. Pero los de C dijeron que no. “Lo ha matado Xavi”… Entonces Xavi, dice “¿Qué pruebas tenéis de que lo he matado yo?”… Entonces los de C, van llorando a los de A y le dicen “Xavi es muy malo y nos ha matado la aplicación, Xavi malo, Xavi feo”. Y entonces A dice “Xavi, si no lo demuestras antes del viernes, tú serás el asesino”.

Y así es parte de mi vida, intentar probar que yo no soy el asesino de todos los cadáveres que salen a flote, da igual que se encuentre a alguien de C todavía apuñalando al cadáver, o que haya cámaras de seguridad que hayan filmado el crímen, Xavi es el presunto asesino siempre, y Xavi ha de probar que no lo es… Manda huevos la cosa…

Y en eso he estado hoy. Mirando y mirando logs… Los logs son ficheros en que se va escribiendo todo lo que hacen las aplicaciones de software, para que si pasa alguna cosa mala se pueda saber que ha sido. Son como las huellas, el pelo, el ADN de los CSI. El problema es que son ficheros larguísimos en que en un segundo se escriben cientos y cientos de líneas de información… Pues todo el día de hoy mirando eso… Para que os hagais una idea encontrar algo allí es como si alguien os dice "Mira, me llamo Sánchez y mi telefono acaba en 6, búscame en la guía". Horas y horas repasando teléfonos de Sánchez, hasta que encuentro al Sánchez que busco.

Una vez hecho esto, hay que mirarse el código de la aplicación para ver en que punto ha pasado lo que has visto en los logs. Más líneas y líneas de código hecho con los pies que hay que mirar. Líneas y líneas...

Hasta que lo encuentras y por fin, he podido demostrar que yo no era el asesino, sino que como siempre eran los de C. Pues así cada día, me paso horas demostrando que todo lo malo que les pasa a los de C es pq los de C son muy malos, muy malos haciendo lo que hacen.

El caso de hoy era como si dijeran. “Yo he salido de casa esta mañana con mi cartera. He ido a trabajar y al llegar a la oficina ya no la tenía. Al llegar a la oficina he visto a Xavi, Xavi me ha robado la cartera.” Pues hoy he tenido que ir a casa de C y decirles “pero seréis melones, no veis que habéis salido de casa sin la cartera”... Pero es que mañana dirán lo mismo, y tendré que ir a una papelera de la calle y decir "Melones, la habéis tirado a esta papelera". Y el siguiente se la habrán dejado en la panaderia...

Os parecerá chorra , pero es que así son las cosas muchas veces en el mundo de la empresa. El problema es que muchas veces lo que te pasa es que llegas tú a la oficina saludas al de C, y te empieza a llamar ladrón pq le has robado la cartera, viene la policía, te detiene, te pegan, te meten en la cárcel… Cuando tienes suerte, puedes poco a poco empezar a defenderte, pero hasta ese punto ya te has pasado una noche en el cuartelillo… Que perra que es la vida ¿no?

Supongo que no habréis entendido nada, pero que se le va a hacer. Hay muchos por ahí que sí, Pep, Willow, Kaos, Mixizar… ¿A que lo que cuento es así muchas veces?

Los que no hayáis entendido nada, quedaros con que Xavi no es un ladrón…

Canción del día: Rock Star de Hole. Una canción de Hole, el grupo de la Courtney Love la viuda de Kurt Cobain. Esta canción la cantaba la Liv Tyler en aquella película "Belleza robada". Dios que buena que está en esa escena... "... Everyone's the same. We look the same. We talk the same. We even fuck the same. When I went to school in Olympia..."